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sábado, 16 de junio de 2012

Lo tengo en mis manos

Los ancianos de Israel pensaban que tenían a Dios "en sus manos"
"Traigamos a nosotros de Silo el arca del pacto de Jehová, para que viniendo entre nosotros nos salve de la mano de nuestros enemigos." (1 Samuel 4:3)
y resultó que "Israel fue vencido" (1 Samuel 4:10)

Los príncipes filisteos pensaban que tenían a Dios "en sus manos"
"capturaron el arca de Dios, la llevaron... la metieron... y la pusieron." (1 Samuel 5:1-2 )
y resultó que "se agravó la mano de Jehová sobre..." los filisteos. (1 Samuel 5:6, 9, 11)

Los levitas pensaban que tenían a Dios "en sus manos"
y resulta que en su presunción miraron dentro del arca y "Jehová los hirió con tan grande mortandad" (1 Samuel 6:19)


Y resultó que, tanto Israelitas como filisteos, levitas, príncipes y ancianos, todos estaban en las manos de Jehová el soberano de toda la tierra.

"Si de todo corazón os volvéis a Jehová. quitad los dioses ajenos y a Atarot de entre vosotros y preparad vuestro corazón a Jehová, y solo a él servid, y os librará de la mano de los filisteos." (1 Samuel 7:3)

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