Un Hermoso Consuelo para los que están en la Fe
Por Cynthia Altamirano
Romanos 8:28 – 39 (RVR)
28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a
bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
29 Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
30 Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.
Esta
porción de la Escritura, siempre me ha dado consuelo, cuando he llegado a estar
tan derrotada y desilusionada en medio de las circunstancias y batallas que
pasamos durante todo nuestro caminar en el Señor, recurro a esta porción. Creo
que nuestro problema está (como lo han mencionado algunos expositores tales
como Paul Washer, John Piper) en que olvidamos el evangelio, es sumamente
importante, es lo que nos mantiene fuertes durante toda nuestra peregrinación,
uno piensa que ya lo sabemos todo en el evangelio pero siempre debemos ir hacia
él.
Esta
porción está hablando de nosotros, si estamos en el Señor, le amamos, porque Él
nos amó primero (1 Juan 4:19), no está hablando de los inconversos, ellos no
pueden agradar a Dios, por la naturaleza caída no quieren buscar a Dios.
La
palabra nos dice que TODAS las cosas nos ayudan a bien, noten que TODAS las
cosas son TODAS las cosas, esto incluye toda clase de cosas malas o negativas,
angustia, luchas, adversidades, enfermedad, hambre, pobreza, persecución,
incluso la muerte. Las personas que no han creído en el Evangelio nada les
ayuda a bien, no tienen esperanza. Pueda que sólo tengan bendiciones terrenales
mientras vivan, que no son parte de la salvación, esto es la Gracia Común.
“...para que seáis
hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre
malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.” Mateo 5:45
Muchas
veces no entendemos el propósito, el por qué o el para qué de toda
circunstancia adversa que pasamos, la escritura nos da testimonio de que a
través de todo esto El Señor nos conforma más a su imagen, nos acerca más hacia
Él, nos enseña a humillarnos y depender siempre de Él, la prueba de nuestra fe
produce paciencia, todo esto me recuerda a José, por todas las circunstancias
adversas que pasó, y el propósito de Dios en todo eso, que fue bueno:
“Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo
encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho
pueblo.” Génesis
50:20
Después
el Apóstol Pablo nos dice cómo desde la eternidad, Dios nos ha amado y Él ha
estado con nosotros siempre y sigue obrando en nuestras vidas y lo seguirá
haciendo hasta que Él regrese, todo esto conforme a su propósito y voluntad.
1 – Nos conoció.
El Señor
en su infinito amor y soberana voluntad, eligió a cierta cantidad de personas
reconociéndolas como suyas propias, por gracia y no por nuestros méritos, desde
antes de la fundación del mundo. Algunos creen que eligió a aquellas personas
que Él previó que iban a seguirle y obedecerle con fe, pero esto no puede ser
así, dado que la fe es don de Dios, por gracia somos salvos, no por obras para
que nadie se gloríe (Efesios 2:8-9).
“Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia.” Romanos 9:16
“Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia.” Romanos 9:16
“Elegidos según el previo
conocimiento de Dios Padre, por la obra santificadora del Espíritu, para obedecer a
Jesucristo y ser rociados con su
sangre[a]: Que la gracia y la paz
os sean multiplicadas.” 1 Pedro 1:2 (LBLA)
“Según nos escogió en él antes de la fundación
del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él, en amor habiéndonos
predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el
puro afecto de su voluntad.” Efesios 1:4-5
“El verdadero amor es personal, amar realmente
es hacer cosas concretas por individuos concretos, nosotros no podemos concebir
el amor de Dios de otra manera que no sea eminentemente personal, Dios
realmente ama a los que Él ama, no de palabra solamente, sino de hecho y en
verdad. El ama a personas concretas con nombre y apellido, a quienes Él hace
bien en formas concretas a pesar de conocerlas a la perfección. Estas personas
siempre han sido amadas por Dios desde antes de la fundación del mundo.” Sugel Michelén
2 – Nos predestinó para que seamos
conformados a la imagen de su Hijo Jesucristo.
“Todas las aflicciones de los creyentes son un medio para que
sean hechos a la imagen de Cristo.”
Juan Calvino
“Porque somos hechura suya, creados en Cristo
Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que
anduviésemos en ellas.” Efesios 2:10
Aquí
entra el proceso de Santificación que El Espíritu Santo obra en nosotros
durante todo nuestro peregrinaje hasta que Cristo venga y seamos perfectos.
Esta es nuestra meta, llegar a ser conformes a la imagen de Cristo, Adan fue
creado a la imagen de Dios, pero esta imagen fue distorsionada por el pecado,
pero restaurada en Cristo, quien fue y es la imagen de Dios.
“Estando persuadido de esto, que el que comenzó
en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo.” Filipenses 1:6
“Por tanto, nosotros todos,
mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos
transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del
Señor.” 2
Corintios 3:18
2.1
Para que Él sea el primogénito entre muchos hermanos.
Cristo es preeminente
y tiene el más alto lugar entre los hijos de Dios, Él es nuestro ejemplo y Dios
nos manda que seamos santos como Él es santo, y que lo imitemos y seamos un
claro testimonio de su carácter hacia el mundo.
“Porque el
que santifica y los que son santificados, de uno son todos; por lo cual no se
avergüenza de llamarlos hermanos.” Hebreos 2:11
3 – Nos llamó, “Los que aman a Dios fueron
llamados conforme a su propósito”, “Y a los que predestinó (o Eligió), a éstos
también llamó.”
El
Apóstol Pablo se refiere al llamamiento eficaz, que es el llamado que el Señor
hace al arrepentimiento y a creer en su Evangelio a todo el mundo, sólo los que
ha predestinado responden al llamado eficazmente. El Espíritu Santo primero
tiene que obrar la conversión y regeneración en nuestros corazones para
responder eficazmente, ya que dado a nuestra naturaleza pecaminosa, no queremos
ir a Dios.
El Espíritu Santo nos convence de pecado, convenciéndonos de nuestra necesidad de Cristo, llevándonos al arrepentimiento y a abrazar y creer en el Evangelio.
El Espíritu Santo nos convence de pecado, convenciéndonos de nuestra necesidad de Cristo, llevándonos al arrepentimiento y a abrazar y creer en el Evangelio.
Todo el
que ha sido eficazmente llamado, ama a Dios.
4 – Nos justificó.
Dios hace
una declaración legal sobre nosotros después de habernos arrepentido de
nuestros pecados y haber creído en el evangelio de Cristo gracias a su
sacrificio expiatorio. Él nos declara justos delante de sí mismo gracias a que
Cristo pagó por nuestros pecados y a la vez nos imputa la perfecta justicia de
Cristo, dado que Él nunca pecó y tuvo una vida perfecta delante de Dios.
Esto no quiere decir que en el momento de nuestra conversión, ya seamos perfectos a semejanza de Cristo, para llegar a ser como Cristo necesitamos de la santificación, que es progresiva durante todo nuestro peregrinaje.
Esto no quiere decir que en el momento de nuestra conversión, ya seamos perfectos a semejanza de Cristo, para llegar a ser como Cristo necesitamos de la santificación, que es progresiva durante todo nuestro peregrinaje.
“Por cuanto todos pecaron, y están
destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados
gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús,
a quien
Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su
justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados
pasados, con la mira de manifestar en este tiempo su
justicia, a fin de que él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe
de Jesús.”
Romanos 3:23-26
“Justificados, pues, por la
fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.” Romanos 5:1
5 – Nos Glorificó
Noten que
la glorificación de nuestros cuerpos, sucederá en un futuro cuando Cristo
vuelva, pero el Apóstol Pablo lo escribió como si ya hubiese acontecido!, esto
nos muestra la certeza, seguridad y confianza de que verdaderamente sucederá! Y
no hay ninguna sombra de duda, tal debe ser nuestra esperanza.
“Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió.” Hebreos 10:23
“Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió.” Hebreos 10:23
“Porque todas las promesas de Dios son en él Sí,
y en él Amén, por medio de nosotros, para la gloria de Dios.” 2
Corintios 1:20
La glorificación es la meta de todo
cristiano, después de haber perseverado durante nuestro peregrinaje seremos
resucitados (los hermanos quienes vivieron tiempo atrás) y glorificados en
cuerpo y alma todos juntamente con Cristo en su segunda venida.
“He aquí, os digo un misterio: No todos
dormiremos; pero todos seremos transformados, en un momento, en un abrir y
cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los
muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados.
Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto
mortal se vista de inmortalidad. Y cuando esto corruptible se haya vestido de
incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se
cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria.” 1 Corintios 15:51-54
Entraremos en la gloria de nuestro Señor
Jesucristo, así mismo toda su creación será restaurada y glorificada:
“Porque sabemos que toda la creación gime a
una, y a una está con dolores de parto hasta ahora; y
no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del
Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la
adopción, la redención de nuestro cuerpo.” Romanos 8:21-23
“Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia.” 2 Pedro 3:13
Más que Vencedores
31 ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra
nosotros?
Qué
diremos a todo esto tan grandioso??!!, siéntanse privilegiados como dice el
hermano Carlos Astorga!!, Si El Señor está con nosotros quien es todopoderoso,
victorioso, majestuoso, inmutable, infinito, misericordioso, soberano, etc.,
nada ni nadie puede hacerle frente a Él que es grande y temible!.
32 El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por
todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha
dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas
tenga vida eterna.” Juan
3:16
Dios no rehusó entregar a su único Hijo, por
amor a nosotros aún siendo pecadores.
“Ciertamente, apenas morirá alguno por un justo; con todo, pudiera ser que alguno osara morir por el bueno. Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.” Romanos 5:7,8
“Ciertamente, apenas morirá alguno por un justo; con todo, pudiera ser que alguno osara morir por el bueno. Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.” Romanos 5:7,8
Cuán grande e inmenso el amor el de Dios!,
creo que nunca podremos comprenderlo por completo, pero nunca debemos
olvidarlo, que somos amados, y que podemos recurrir hacia Él con confianza.
Juntamente con Cristo todas las cosas que necesitemos serán provistas, esto no
sólo se refiere a cosas espirituales, sino materiales y terrenales también, no
nos afanemos hermanos, Él tiene cuidado de nosotros.
Debemos tener cuidado también de no caer al extremo de buscar al Señor sólo por prosperidad terrenal, Él nos da lo justo, lo necesario, Él nos enseña a depender siempre de Él, y ser agradecidos, porque nada obtenemos por nuestros méritos, sino por los de Él, no tenemos de qué gloriarnos, Él no quiere que desviemos nuestra vista de Él.
Debemos tener cuidado también de no caer al extremo de buscar al Señor sólo por prosperidad terrenal, Él nos da lo justo, lo necesario, Él nos enseña a depender siempre de Él, y ser agradecidos, porque nada obtenemos por nuestros méritos, sino por los de Él, no tenemos de qué gloriarnos, Él no quiere que desviemos nuestra vista de Él.
33 ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica.
Pueda que
el enemigo y sus demonios nos acusen continuamente ante el Señor, pero estas
acusaciones no tienen validez, puesto que Dios ya nos justificó, somos justos
delante de Dios por que Cristo ya pagó por nuestros pecados.
34 ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el
que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también
intercede por nosotros.
“Ahora, pues, ninguna condenación hay para los
que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme
al Espíritu.” Romanos
8:1
Cristo
murió y padeció por nuestros pecados eficazmente una sola vez y para siempre,
su sacrificio fue perfecto, y queda fuera del alcance de toda contradicción al
haber sido resucitado y puesto a la diestra de Dios, esto es un claro
testimonio de que su sacrificio fue acepto por Dios, exaltándolo hasta lo sumo.
Y por si
fuera poco, El está intercediendo por nosotros, se fijan cuanta seguridad nos
da Dios?? , El no quiere que dudemos, El nos da seguridad, necesitamos
arrepentirnos de todas aquellas veces que hemos fluctuado y dudado de Él.
“Por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos.” Hebreos 7:25
“Por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos.” Hebreos 7:25
35 ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia,
o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?
Todas
estas preguntas son retóricas o sarcásticas, conduciéndonos a una clara
negación, nada ni nadie podrá jamás separarnos del amor de Cristo, ni aún
nosotros mismos con innumerables defectos, errores y pecados, hará que seamos
separados de Él, siendo aún pecadores Él nos amó y murió por nosotros (Romanos
5:8), la salvación es por fe, no por obras.
El Apóstol Pablo menciona 7 adversidades o cosas negativas habiéndolas experimentado tal como 2 Corintios 11:23-29 lo indica antes de escribir la carta a los Romanos, a excepción de “la espada”, con la cual él sería ejecutado.
Tribulación
es una prueba o adversidad externa y la angustia es una preocupación o
adversidad interna.
36 Como está escrito:
Por causa de ti somos muertos todo el tiempo;
Somos contados como ovejas de matadero.
Por causa de ti somos muertos todo el tiempo;
Somos contados como ovejas de matadero.
“Porque a vosotros os es
concedido a causa de Cristo, no sólo que creáis en él, sino también que
padezcáis por él, teniendo el mismo conflicto que habéis visto en mí, y ahora oís que hay
en mí.” Filipenses 1:29-30
En nuestro peregrinaje, desde nuestra
conversión, siempre estaremos unidos a Cristo, no solo participando de sus
bendiciones y redención, sino también en sus padecimientos, por lo cual somos
perseguidos, maldecidos, rechazados como Él lo padeció, y produce en nosotros
paciencia, dependencia en Él, humillación y todo por amor a Él.
Esto tampoco significa que en nuestros
padecimientos Cristo nos abandone, Él hace justicia y paga con tribulación a
los que nos atribulan, sufriendo la eterna perdición y condenación excluidos de
su presencia. (2 Tesalonicenses 1:6-10). Yo pagaré dice el Señor, mía es la
venganza.
“Considerad a aquel que sufrió tal
contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse
hasta desmayar.” Hebreos
12:3
Sintámonos bienaventurados de padecer por Él
porque grande será nuestra recompensa en los cielos.
“Bienaventurados los que padecen
persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan
toda clase de mal contra vosotros, mintiendo. Gozaos y alegraos, porque
vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los
profetas que
fueron antes de vosotros.” Mateo 5:10-12
37 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de
aquel que nos amó.
Somos más que vencedores no por nuestro
valor, no por nuestras fuerzas, no por nuestros méritos, no por nuestro
carácter, sino por medio de Cristo y su amor por nosotros.
Dado que todas las cosas nos ayudan a bien
por medio de Cristo, somos mucho más que vencedores.
“El que es más que vencedor hace que el enemigo sea una ayuda.”
William Hendriksen
38 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni
ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá
separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.
Si acaso morimos tenemos la certeza de que
estaremos con El Señor. La vida terrenal con sus dificultades, angustias,
tentaciones, pruebas no nos apartarán de Dios, nos ayudarán a bien por que por
medio de todo esto somos perfeccionados a la imagen de Cristo.
Dios ha designado a los Ángeles como
espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de nosotros (Hebreos
1:14), por lo cual no pueden apartarnos de Dios. Principados y potestades puede
referirse a los ángeles caídos o demonios, incluso ellos obedecen a Dios y a
pesar de sus maquinaciones no pueden apartarnos de Dios sino al contrario, son
de ayuda para ser perfeccionados y acercarnos más a Dios reconociendo nuestras
debilidades y tentaciones.
Problemas presentes o por venir, no nos
apartarán del amor de Dios, no importa cuánto se demore alguna prueba,
confiemos en el Señor y perseveremos en la fe.
No hay nada en las alturas ni en las
profundidades que puedan separarnos de Dios. Y por si faltara alguna cosa de
mencionar, ni ninguna cosa creada, cualquiera que fuere, nos podrá separar del
amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor Nuestro.
¿QUE DIREMOS A TODO ESTO HERMANOS?, NO HAY
MAYOR CONSUELO Y ESPERANZA QUE SU HERMOSO EVANGELIO Y LA MARAVILLOSA OBRA DE
REDENCIÓN EN NOSOTROS DESDE ANTES DE LA FUNDACIÓN DEL MUNDO HASTA LA ETERNIDAD,
NO TENEMOS EXCUSAS PARA ANGUSTIARNOS O DUDAR DEL SEÑOR.
ESTE PASAJE NOS MUESTRA TAMBIÉN ALGUNOS DE
SUS ATRIBUTOS, QUE ÉL ES FIEL, ES INMUTABLE, ES SOBERANO, SU LLAMAMIENTO
IRREVOCABLE, INCLUSO INTERCEDE POR NOSOTROS, ADEMAS NOS MUESTRA LA DOCTRINA DE
LA PERSEVERANCIA DE LOS SANTOS, SI ÉL NOS HA SALVADO, CON CERTEZA ESTAREMOS CON
ÉL EN SU GLORIA, EL QUIERE QUE ESTEMOS SEGUROS EN ÉL SIN DUDAR, QUE CONFIEMOS
EN ÉL, SIENTANSE AMADOS Y PRIVILEGIADOS COMO DICE EL HERMANO CARLOS, FUERA DE
EL NO HAY ESPERANZA, ARREPINTAMONOS DE NUESTROS PECADOS E INSEGURIDAD, VAYAMOS
HACIA ÉL CONFIADAMENTE Y RECORDEMOS SIEMPRE SU EVANGELIO POR QUE ESTO SIEMPRE
NOS DARÁ FORTALEZA FRENTE A CUALQUIER PRUEBA O ADVERSIDAD.
“Mas el Dios de toda gracia, que
nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco
de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca.” 1 Pedro 5:10